Enteramente autodidacta, inició su andadura en la técnica del óleo con gran brillantez, aunque pronto se vió cautivado por la acuarela, siendo sus primeros escarceos en compañía de Manchón, al que le unía una entrañable amistad y cautivado por esta técnica más difícil como reto para un pintor que se presta al cuerpo a cuerpo con la naturaleza. Pronto contacta y entabla amistad con alguno de los mejores pintores del momento como Fermín Pedrosa, Ruperto Caravia, Pedro Alvarez, Casimiro Baragaña, Manuel del Rio, Andrés Marbán, Andrés Tresguerres y otros, formando un grupo que frecuenta las salidas al campo para pintar al natural, así como para zcudir a las entrañables y enriquecedoras visitas a las distintas salas de exposiciones. Ellos son los que le animan a realizar su primera exposición individual en 1976, continuando desde entonces su trabajo pictórico de forma ininterrumpida con exposiciones por toda la geografía asturiana y nacional. MUESTRA DE SUS OBRAS |